Continuan clamores por costruccion carretera norte-sur.

Escrito por: Fabio R. Herrera Miniño
De tiempo en tiempo la opinión pública se entusiasma y se interesa opinando acerca de la necesidad de disponer de una comunicación más expedita entre el norte y el sur del país, que en la actualidad obliga a largas rutas, ya costosas de por sí, por el encarecimiento de todo lo concerniente al transporte.
Vimos cómo se agitaron las aguas cuando el gobierno anunció que se iba a reconstruir la carretera Internacional, pero con una visión muy ambiciosa que abarcaba a toda la región fronteriza, desde Dajabón hasta Pedernales. Afortunadamente esto no pasó de noticias en los medios. Al poco tiempo se anunció un concurso para la reconstrucción de la importante vía desde Piedra Blanca-Rancho Arriba-San José de Ocoa, para lo cual participaron varias empresas, y como es la norma actual, la presencia de varias empresas brasileñas, tan favoritas de los políticos oficialistas.
La reconstrucción de esa carretera se vende como si fuera la vía Cibao-Sur, tan anhelada por sectores de ambas regiones que buscan agilizar el contacto y servir de estímulo para el incremento del comercio inter regional.
Ya una vez existió una carretera de excelente trazado que comunicaba a Constanza con San José de Ocoa inaugurada en 1956, pero como todas las obras atendidas por los gobiernos, la dejaron destruir; para 1965, apenas se podía transitar por la misma, debido a que nunca se le atendió con un mantenimiento adecuado.
Por su parte, sectores de opinión y empresariales de Santiago y San Juan han propugnado por otra ruta que hiere en sus entrañas a la Cordillera Central, atravesaría algunos santuarios de parques nacionales que afectarían el ecosistema de esa zona. También existe otra ruta probable, que una vez fue la de los patriotas de la Independencia y de la Restauración, que es la senda desde Constanza hasta Padre Las Casas. Hoy es la ruta favorita de los monteos en poderosos motores de los aficionados a ese deporte.
Es muy conveniente que se reconstruya la vía desde Piedra Blanca a Rancho Arriba, pasando por Juan Adrián hasta San José de Ocoa, sin ser la vía Cibao-Sur oficialista; pero la misma no acortaría la distancia entre las dos regiones, con un resultado similar si se reconstruyera la vía desde Constanza hasta Ocoa. Ambas vías de la provincia de Ocoa son vitales para el impulso agrícola de esa región que tuvo su despertar desarrollista gracias a los empeños del recordado sacerdote canadiense Luis Quinn, quien ofrendó su vida dando un ejemplo de dedicación al trabajo y de amor a sus semejantes.
La única ruta posible, que acortaría la distancia entre Santiago y San Juan, que es el objetivo real de los importantes sectores de presión de ambas comunidades, sería la que uniría a la presa de Sabaneta en San Juan con San José de las Matas, pasando por Las Manaclas y El Rubio. Esta ruta perjudicaría de mala manera el eco sistema de los dos parques nacionales de la zona y de la sierra, la cual está sometida a grandes programas de reforestación y de recuperación de las cuencas serranas.
Lo prudente es iniciar la reconstrucción de la carretera de Piedra Blanca a Ocoa, vía Rancho Arriba, asegurando de esa manera una recuperación de la producción agrícola y cafetalera de esa región ocoeña.