¿Y ahora quién podrá defendernos? ¡oh, Danilo Medina!

San José de Ocoa

Por: Omar Ureña
Las actitudes como enfrentamos la vida va a servirnos para ser exitosos o fracasados y entre uno y el otro, la opción debe ser optimista para poder alcanzar el éxito y ese escalón por mas distante que pueda estar, algún día se puede alcanzar, además, que lo que uno piensa es lo que atrae. ¿Porque digo esto? Resulta que viendo en un programa de televisión local en una rueda de prensa donde estuvieron reunidos diferentes autoridades para coordinar los pasos a seguir en torno al medio ambiente, el incumbente provincial en una llamada telefónica realizada al espacio televisivo se le ocurre decir que el problema de medio ambiente no lo resuelve nadie en Ocoa, según él, pueden poner a quien sea en ese cargo y nadie lo podrá controlar. Los fuegos y la tala de árboles en las cuencas de nuestros ríos según la actitud del ingeniero Juan Antonio Castillo seguirán ( y no necesariamente lo expresara con sus palabras, pero si con su actitud derrotista) quiere decir que nos fuñimos porque quien está para asumir su papel no presenta una solución a corto, mediano ni a largo plazo.




Para darle sentido a esta publicación he traído a colación esta expresión del lic. Danilo Medina que en innumerables ocasiones fue abordado por la prensa nacional, sobre los retos que tenía el cargo que asumiría, él, expreso lo siguiente:

“Decidí servir a mi país en cualquier circunstancias de la vida, por eso no me asustan los malos momentos que está viviendo el mundo, no tengo miedo de enfrentar decisiones y dificultades, yo me preparé para gobernar a la República Dominicana en los buenos y en los malos momentos” Danilo Medina.


Si nadie podrá controlar la tala de árboles y el fuego en las montañas nuestras, quiere decir que las generaciones futuras de Ocoa, están condenadas a no existir. Ahora quiero preguntarme ¿no existe una fiscalía medioambiental? ¿una procuraduría fiscal? ¿militares y policías? Le doy la razón Juan Antonio Castillo, solo no se puede, debemos todos y todas asumir el rol que nos corresponde y el que no cumpla que renuncie, el que no quiera perder amigos, por no perder el carguito que se valla a su casa y así no enfrentará a nadie y será feliz por el deber incumplido.